Para continuar, lo mejor de toda la celebración. Una limusina nos estaba esperando para darnos un paseo por Madrid, hacernos una sesión de fotos y llevarnos al restaurante. Mi chico pensaba que era broma y hasta que no estaba sentado dentro descorchando la botella de champán no se lo creyó. Fue alucinante.
En medio de los nervios y la fascinación mi chico me regaló las entradas para ir a ver al Mago Pop al Teatro Calderón. ¡Qué ganas!
Y para rematar la noche, una cena con vistas al terreno de juego del Santiago Bernabeu. Tenía ganas de ir y esta era la ocasión perfecta.
Fue una noche inolvidable. Y es que 10 años, hay que celebrarlos a lo grande.
La celebración continuó con un viajecito de fin de semana que os contaré en otro post.
¡Hasta la próxima!
Pedazo de aniversario y celebración oleeeee!! Felicidades parejita!!. Me alegro que lo disfrutarais!!. Por muchos más años y que nosotros los veamos.un besazo
ResponderEliminar