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jueves, 6 de abril de 2017

Maquillaje

El martes os enseñé el look que llevé en el bautizo y cumpleaños y os dije que hoy os enseñaría el maquillaje. La palabra maquillaje suena a ritual de hora y media, pero en realidad mi momento maquillaje es muy sencillo. Por norma general lo único que me pongo es lápiz de ojos, máscara de pestañas, y colorete. En ocasiones más especiales añado sombra y pintalabios.

Os enseño lo que usé el sábado.

Perfilador de ojos negro de Deliplus.


Máscara de pestañas negra. No tengo ninguna marca especial que me guste, cojo el primero que pille. Este es de Carrefour.


Sombra de ojos que en realidad es un colorete. Es del maletín que me regalaron en reyes.



Colorete de Pinaud. Es de un maletín que me regalaron hace más de 6 años. 



Y por último el pintalabios. Es el 102 de Kiko



Y lo que os quería enseñar era un truco para cuando nos pintamos las uñas. Yo soy un desastre y siempre me salgo y acabo con los dedos (sobre todo los de la mano derecha) más pintados que las uñas. Pues bien, viendo algún video de Patry Jordan en Youtube, dio un truquillo para que cuando nos pasara eso, luego fuera más fácil que se nos quitara la pinturta de los dedos. Ese truco es vaselina, ponerse vaselina alrededor del dedo, así aunque pintemos fuera, luego al lavarnos las manos se irá sin ningún problema. Al principio no confiaba mucho en este truco, pero la verdad es que funciona y bastante bien.



Todo preparado para empezar. Lo primero con un bastoncito y la vaselina, lo aplicamos por la piel alrededor de la uña. Y luego empezamos con este si, mi ritual cada vez que me pinto las uñas. Primero aplico la base vitaminada de Deliplus. 



Luego el color. En estanocasión el 281 de Kiko. 



Y por último el top coat también de Kiko.


Y así, cada vez que me pinto las uñas se me va más de una hora. Por eso mi chico me regaló un secador para que tardara menos jajaja porque es una odisea y siempre se me acababan estropeando y tenía que repetir todo. Ahora parece que estoy más lista para estos menesteres. 

Pues bien, cuando están bien secas, vamos a lavarnos las manos con agua caliente y jabón para que se quiten los restos de pintura de la piel y voilá, ¡los restos se van! A mi me costó un poco más porque en un par de dedos me los había pintado enteros y verdaderos como dice mi madre, pero el restro fue espectacular.



Y esto es todo por hoy. Os recuerdo que el blog se va de vaciones, así que nos volvemos a ver el día 18 de Abril. Qué paséis unas muy felices vacaciones. Disfrutarlas al máximo. Yo aprovecharé para reírme, relajarme y pensar.


¡Hasta la próxima!

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